¡Campos de Extremadura!
¡Verdes de primavera!
El viento de abril ya vino
para soltarte las trenzas,
y con peines invisibles
tu verde melena peina.

Orgullosos como mares
que crecen sin mareas,
llenándome estáis los ojos
de amapolas y violetas,
de espigas de verde trigo
de jaras y de promesas.

¡Campos de Extremadura!
¡Mar que no tiene velas!
El viento de abril ya vino,
para soltarte las trenzas.